Si tenemos que destacar algún acontecimiento especial en el terreno musical durante el pasado 2007, éste no podría ser otro que el descubrimiento (¡Gracias, Fátima, reina de Trebujena!) de Amy. Pasando de lindezas referidas a sus asuntos personales, debemos reconocer que "Back to black" (su segunda publicación después de "FranK", 2004) ha sido para nosotros, a pesar de los excelentes trabajos de pesos pesados como Paul McCartney, Ray Davies o Mark Knopfler, el disco del año. Desde los primeros acordes de ese impresionante "Rehab" hasta las últimas notas de la maravillosa demo, incluida en la versión Deluxe, de "Love is a losing game", se puede percibir que estamos ante una obra musical genial. Las letras brutalmente honestas, la producción (recordando al denostado Phil Spector) y los arreglos de Mark Ronson hacen recordar a la época dorada del soul más preciosista, mezclado con la tecnología del siglo XXI. Las melancólicas melodias, los registros vocales y la franqueza de la Winehouse han supuesto todo un descubrimiento en este mundo donde reinaba lo estrictamente comercial. Los que solemos escuchar música sin concesiones, echábamos en falta artistas de la talla de la "Wino", capaces de crear temas tan impactantes como el que da título al disco o exquisitices como "You know I´m no good", sin menospreciar la capacidad que ha demostrado para hacer suyos clásicos como "Cupid" del añorado Sam Cooke, de "To Know him is to love him" del propio Spector o versiones de temas recientes, como el maravilloso "Valerie"(ver y oir la versión acústica en el vídeo) del grupo británico The Zutons, incluido en su disco del 2006, "Tired of hanging around". Si aún no la conoces, pasa de noticias amarillas, siéntate cómodamente, busca alguna actuación en directo y observaescucha. A continuación, para reponerte, ponte "Back to black" . Soul. Alma.
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